En el frío norte de Canadá, Stephen Jull pasó de dar clases a niños, a crear empresas de educación apoyadas en la tecnología.
Jull es el CEO de Epic for Kids, una compañía que busca hacer más accesible la lectura para niños y que ha sido galardonada internacionalmente.
Durante su panel Driving Change and Impact: The Unicorn EdTech Experience en el IFE Conference 2024 del Institute for the Future of Education explicó que el mundo vivió una efervescencia en la tecnología tras la pandemia, que obligó a las escuelas a reinventarse y a ofrecer nuevas maneras de llevar conocimiento a las personas.
En este escenario, habló las oportunidades que se han abierto para que académicos e investigadores den un salto parecido al suyo, del aula y los laboratorios al emprendimiento y a la creación de tecnología y empresas educativas.
Curiosamente, dice que mantener “cierto nivel de ingenuidad”, no sobre el tema educativo o la tecnología que se está desarrollando, sino sobre empezar a construir una compañía a pesar de no tener experiencia en el emprendimiento
“Así es como muchas personas comienzan, incluso si no tienes todas las piezas del negocio juntas. Ser un experto a veces puede ser un obstáculo y, a veces, una pequeña ingenuidad te hace menos temeroso de dar el paso”, dijo en entrevista con TecScience.
Los primeros pasos para emprender
Jull no solo compartió su trayectoria, sino que enlistó algunos de los principales retos y oportunidades para el éxito de sus empresas, especialmente, antes de llevar la idea a inversionistas.
“Es importante tener −primero− una gran idea, un equipo excelente y una prueba de concepto. Las startups olvidan que hay mucho que se puede hacer sin recaudar ningún capital”, comentó.
Crear primero un producto mínimo viable, obtener un impulso e incluso generar algo de ganancias, por mínimas que sean, son los primeros pasos que pueden realizar las empresas educativas de base tecnológica, antes de preocuparse por el financiamiento.
A los ojos de Jull, en zonas como Latinoamérica, existen también factores que facilitan la adopción exitosa de proyectos de tecnología educativa, como una cultura de colaboración y esfuerzo en la región para avanzar juntos.
Al explorar el tema del financiamiento, se vuelve esencial la importancia de una planificación cuidadosa y el desarrollo de ideas sólidas, antes de buscar inversionistas o personas que puedan sumarse a los proyectos.
Según su filosofía, los emprendedores no deberían subestimar el poder de las conexiones y sus redes de apoyo, ya que se vuelven uno de los pilares que aseguran el éxito empresarial.
“Cuantas más personas conozcas en tu red, más personas te ayudarán en tu negocio. Es fundamental para el éxito a largo plazo tener buenos amigos dentro y fuera de tu startup en los que puedas apoyarte y confiar”, afirmó.
