La edición genética CRISPR-Cas9 abrió una cartera de posibilidades al desarrollo médico y científico, pero también un debate ético sobre la manipulación del genoma humano que ha encontrado sus primeros lineamientos.
La Organización Mundial de la Salud hizo públicas las primeras recomendaciones sobre la manipulación a partir del descubrimiento de las “tijeras” de edición genética CRISPR-Cas9.
Reglas de edición genética
La OMS sustentó sus lineamientos en dos informes que recomiendan que la edición del genoma humano se use como una herramienta para la salud pública.
La organización internacional hizo énfasis en límites de seguridad, eficacia y ética en el método de edición genética CRISPR-Cas9.
Estas primeras recomendaciones se dan después de dos años de análisis, gracias a una consulta en la que participaron científicos, pacientes, líderes religiosos y pueblos indígenas.
Su discusión se apresuró tras el descubrimiento de la herramienta CRISPR-Cas9.
«La edición del genoma humano tiene el potencial de hacer avanzar nuestra capacidad para tratar y curar enfermedades, pero sólo se logrará su pleno impacto si la desplegamos en beneficio de todas las personas, en lugar de alimentar más desigualdades sanitarias entre los países y dentro de ellos», dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Expertos discutieron sus alcances
El grupo fue integrado por el Comité Asesor de Expertos para el Desarrollo de Normas Globales para la Gobernanza y la Supervisión de la Edición del Genoma Humano.
Su objetivo fue examinar los desafíos científicos, éticos, sociales y legales asociados con la edición del genoma humano: somático, línea germinal y hereditario.
Luego de dos años de trabajo, la OMS publicó dos documentos: Edición del genoma humano: un marco para la gobernanza y Edición del genoma humano: documento de posición.
El Comité elaboró una serie de recomendaciones en nueve ámbitos:
- Liderazgo de la OMS y de su dirección general
- Colaboración internacional para una gobernanza y supervisión efectivas
- Registros de edición del genoma humano
- Investigación internacional y viajes médicos
- Investigación y otras actividades ilegales, no registradas, no éticas o inseguras
- La propiedad intelectual
- Educación, compromiso y empoderamiento
- Valores y principios éticos para uso de la OMS
- Revisión de las recomendaciones.
Aunque la OMS reconoce que la edición genómica, que implica alterar el ADN del ser humano, «puede ayudar a diagnósticos más rápidos y precisos, conseguir mejores tratamientos y prevenir desórdenes genéticos», también admite que «existen riesgos».
Según Soumya Swaminathan, científica jefe de la OMS «estos nuevos informes del Comité Consultivo de Expertos de la OMS representan un salto adelante en este ámbito de la ciencia que está surgiendo rápidamente”.
Las recomendaciones
El marco de gobernanza que recomienda la OMS ofrece recomendaciones concretas para afrontar escenarios específicos como:
- Un hipotético ensayo clínico de edición somática del genoma humano para la enfermedad de células falciformes que se propone realizar en África Occidental.
- Una propuesta de uso de la edición somática o epigenética del genoma para mejorar el rendimiento deportivo.
- Una clínica imaginaria con sede en un país que tenga una supervisión mínima de la edición del genoma humano hereditario, que ofrece estos servicios a clientes internacionales tras la fecundación in vitro y el diagnóstico genético preimplantacional.
Ante este tipo de escenarios y de acuerdo al análisis del Comité, la OMS recomienda que las pruebas clínicas de edición genómica sean revisadas y aprobadas por comités de ética en la investigación y que la manipulación del genoma hereditario sólo se lleve a cabo en lugares con este tipo de entidades de supervisión.
La OMS convocará a un pequeño comité de expertos para crear un registro de lugares, incluida la forma de supervisar mejor los ensayos clínicos que utilizan tecnologías de edición del genoma humano que son motivo de preocupación.
También planea convocar a las partes interesadas multisectoriales para desarrollar un mecanismo accesible para la notificación confidencial de preocupaciones sobre la investigación de edición del genoma humano y otras actividades posiblemente ilegales, no registradas, no éticas e inseguras.
Las “tijeras” genéticas
Uno de los primeros usos de la edición del genoma humano es el tratamiento y prevención de enfermedades.
Sin embargo, su uso plantea cuestiones éticas que suponen la existencia de lineamientos de solidos de observancia.
La tecnología que le valió el Premio Nobel de Química 2020 a las investigadoras Emmanuelle Charpentier, del Instituto Max Planck de Biología de la Infección en Berlín; y Jennifer Doudna, científica del Instituto Médico Howard Huhges e investigadora principal de los Institutos Gladstone; abrió el debate mundial.
Un debate de años
La necesidad de recomendaciones coordinadas por la OMS surgió en 2018.
En ese año en se conoció que el biólogo chino, He Jiankui, editó los genes de dos embriones humanos para evitar que se contraigan el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH)
En diciembre de ese mismo año, la OMS estableció un comité consultivo mundial multidisciplinario de expertos.