Tomar el sol tiene múltiples beneficios para la salud, entre ellos la producción de vitamina D y el refuerzo de nuestro sistema inmune. No obstante, dado el aumento en los casos de cáncer de piel durante las últimas décadas, los expertos recomiendan limitar nuestra exposición entre cinco a 20 minutos al día, de acuerdo con la época del año.
La dermatóloga Mónica Morcos González, de TecSalud, nos dice en entrevista con TecScience que no es común hablar de los aspectos positivos de tomar el sol, pues los especialistas generalmente se enfocan en los riesgos.
Sin embargo, lo primero que hay que considerar es que el sol rige nuestro ciclo circadiano, es decir, el reloj interno que regula los ciclos de sueño y vigilia. Por lo tanto, de acuerdo con la experta, exponernos a sus rayos mejora nuestra disposición a dormir en la noche.
¿Qué otros beneficios obtenemos de tomar el sol?
Además de mejorar nuestra calidad de sueño, tomar el sol tiene otros beneficios como: alcanzar niveles óptimos de vitamina D, reforzar nuestras defensas y elevar nuestros niveles de serotonina.
“Para reforzar nuestro sistema inmune, está comprobando que hay que tomar sol y otra cosa que mejora son los niveles de vitamina D en sangre”, menciona Morcos González.
La especialista nos explica que cuando la piel se expone al sol, un precursor del colesterol se convierte en la pre-vitamina D3 que, posteriormente, al pasar por el torrente sanguíneo, se transforma en vitamina D.
Cabe mencionar que el 80% de la vitamina D que recibe nuestro cuerpo llega por medio del sol y solo podemos obtener un 20% de ella a través de los alimentos, de acuerdo con la experta.
¿Por qué es importante la vitamina D?
Esta vitamina se conoce por ser benéfica para los huesos, en tanto que ayuda a absorber el calcio. Asimismo, favorece la salud de la piel y mejora la producción de serotonina, lo cual mejora el estado de ánimo.
Sobre este último punto, Morcos González señala: “sabemos que el 20% de la población que vive en lugares donde hay poco sol, como los países nórdicos, sufre de una depresión invernal por falta de luz solar”.
La dermatóloga, también nos comparte que a su consultorio llegan muchos pacientes por problemas de caída del cabello, los cuales, en la mayoría de los casos, están relacionados con bajos niveles de vitamina D.
Con relación al uso de bloqueador solar, la especialista menciona: “Encontré un artículo que dice que puedes disfrutar de esos beneficios aunque te lo pongas, pero yo creo que es mejor tomar poquito sol y obtenerlo directamente”.
Finalmente, Morcos González recomienda tomar el sol de cinco a 10 minutos diarios durante el verano, mientras que si es invierno podrían ser hasta 20. No es necesario exponer todo el cuerpo, con un 40% es suficiente.
¿Cómo podemos protegernos de los riesgos de estar bajo el sol?
Si bien la experta nos explicó los beneficios de tomar el sol uos minutos al día (de acuerdo con la época del año), en caso de exponernos por un tiempo mayor, ya sea por recreación o por trabajo, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) recomiendan:
- Usar un sombrero de ala ancha que dé sombra alrededor del rostro, el cuello y las orejas. Las gorras de béisbol y los visores solo protegen algunas partes de la piel.
- Llevar gafas que filtren los rayos UV para protegerse los ojos y la piel que los rodea.
- Usar mangas largas y pantalones largos. Las telas oscuras y de tejido más cerrado son las mejores y hay algunos textiles que contienen factor de protección ultravioleta (UPF).
- Elegir productos con un factor de protección solar (SPF) mínimo de 15 (algunos médicos recomiendan usar productos con un SPF mínimo de 30). Aplique la cantidad indicada de protector a la piel expuesta 30 minutos antes de estar al aire libre. Repita esto cada dos horas o después de nadar o sudar.
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