Ante el crecimiento de la innovación en la manufactura en México y la cercanía con las empresas y el mercado latinoamericano y norteamericano, el Tec de Monterrey anunció la creación de su nuevo laboratorio especializado el Core Lab de Manufactura Aditiva, durante la inauguración del Segundo Congreso Internacional sobre Materiales Avanzados y Manufactura Aditiva.
Este Core Lab estará enfocado en el diseño y fabricación de materiales para la industria, así como en dar atención y brindar servicios especializados para investigadores tanto del Instituto como de empresas y otras instituciones.
La manufactura aditiva es una tecnología revolucionaria que permite la fabricación de piezas y componentes, usualmente con geometrías complejas y mediante la impresión capa por capa, minimizando el desperdicio de material, siendo una opción sustentable.
“Buscamos afrontar la demanda de la industria en el desarrollo de soluciones integrales, en la fabricación de prototipos disruptivos, funcionales y productos fabricados con materiales avanzados y sustentables”, indicó Óscar Martínez, líder del Core Lab y miembro del Institute of Advanced Materials for Sustainable Manufacturing.
Los Core Labs son una iniciativa de laboratorios del Tec de Monterrey, siendo el de Manufactura Aditiva el más nuevo de ellos junto al de Genómica, Ciencia de Datos y una unidad de Investigación Preclínica.
“Hemos centrado la atención en la investigación como un proceso fundamental para mejorar la calidad educativa, para relacionar a la universidad con los problemas reales de la humanidad y, en ese contexto, mejorar la vida de los ciudadanos”, dijo Guillermo Torre, rector de TecSalud y vicepresidente de Investigación del Tec.
Core Lab de Manufactura Aditiva
Uno de los principales objetivos del Core Lab de Manufactura Aditiva es ofrecer una opción ante el nearshoring, es decir, frente a los cambios en la cadena de producción de las empresas, que sucedieron de manera acelerada tras la pandemia de Covid-19.
Estos cambios han provocado que empresas internacionales muevan sus cadenas de suministro a lugares como México, por su cercanía al mercado norteamericano y latinoamericano, por lo que la manufactura aditiva ha tenido una mayor relevancia.
Este laboratorio estará abierto para que la industria y la academia puedan manufacturar piezas y componentes mediante impresión 3D, crear prototipos e investigar insumos, como los polvos con los que se imprimen.
Otro de los principales objetivos es promover la formación de capital humano altamente especializado en esta tecnología, es decir, no solo preparar estudiantes con conocimiento, sino también identificar y desarrollar soluciones tecnológicas que tengan un impacto positivo en la sociedad.
El laboratorio ofrecerá programas de capacitación en diversas técnicas de manufactura aditiva innovadoras, así como también en el desarrollo de nuevos materiales utilizados en este tipo de impresión.
También buscará un diferenciador a nivel nacional e internacional mediante un enfoque de transferencia tecnológica avanzada, es decir, mediante la creación de prototipos y la aceleración de empresas de base tecnológica.
“Queremos consolidarnos como una referencia global en investigación e innovación en el desarrollo de materiales y prototipos funcionales industriales, tomando un rol fundamental en la manufactura aditiva en México y en todo el mundo”, explicó Martínez.
El Core Lab contará con equipo de última y en una primera fase ofrecerá servicios de impresión 3D con una tecnología conocida como fusión directa por láser de metal que utiliza una variedad de materiales, tiene una precisión de 0.015 milímetros y un volumen máximo de construcción de entre 245 y 300 milímetros.
¿Qué habrá en el Core Lab?
Actualmente existe dentro del Core Lab maquinaria especializada como el M2 Series 5 y MLab 200R, siendo esta última capaz de imprimir materiales reactivos como el titanio y aluminio, los cuales fueron adquiridos de la compañía GE Additive, una rama de General Electric dedicada a esta tecnología.
En su primera fase, este laboratorio ofrecerá el servicio de impresión de prototipos funcionales 3D de superaleaciones de níquel, titanio, cobalto y también de materiales tradicionales como aluminio, acero inoxidable y acero martensítico (aceros inoxidables, aleados con cromo y otros elementos).
“El Core Lab juega un papel importante, porque es un lugar que conecta necesidades de la sociedad con talento mexicano soportado por la industria y por el gobierno. Es la única manera de afrontar los retos actuales, desarrollar un ecosistema virtuoso entre industria, academia y gobierno que permita acelerar la innovación”, señaló Gabriel Francisco Arreola, Site Operations Manager & Government relations de GE Additive.
Estrategias de colaboración
Óscar Martínez señaló que este espacio busca ser un punto de encuentro entre la industria, las instituciones educativas, proveedores de tecnología y usuarios finales, para promover la manufactura aditiva en México y el mundo.
Entre sus principales públicos están los grupos de investigación, quienes buscan opciones y espacios para acelerar e innovar dentro de los procesos de fabricación de prototipos funcionales y soluciones tecnológicas que puedan escalar.
De igual manera será un espacio para los estudiantes, tanto de pregrado como de posgrado, quienes enfocan sus investigaciones en la producción, así como también para las administraciones públicas que requieran los servicios del laboratorio.
La industria es otro de los públicos del Core Lab, con quienes se planea colaborar desde la fabricación de prototipos y creación de componentes, hasta la aceleración y escalamiento de tecnología hacia un mercado específico.
Por ejemplo, se busca establecer alianzas con empresas líderes como GE Aviation, NTU y Renishaw, entre otras, así como centros de investigación y universidades −tanto públicas como privadas− que estén interesadas en el desarrollo científico y la tecnología.
“Tenemos que estar a la altura de los retos mundiales que se están presentando con el fenómeno del nearshoring. Hay un estándar mundial que nos está exigiendo y aspiramos a competir, por lo que necesitamos mujeres y hombres comprometidos y talentosos”, explicó José Alfredo Perez, director general del Instituto de Innovación y Transferencia de Tecnología de Nuevo León.